Dejar una relación siempre es complicado y llevar a cabo una ruptura desde el respeto casi que lo resulta aún más. Si a ello se le añade que se trata de un noviazgo de años, de esos que pensabas que serían para siempre, se le añaden más factores determinantes a la ecuación.
De repente, la vida se pone patas arriba aunque hayas sido tú la que ha tomado la decisión y cuando por fin lo haces queda un segundo duelo: el de contarlo, asumiéndolo así por partida doble. Sin embargo, parece ser que una vez más la Generación Z está gestionando esto mejor que la Millennial. O al menos de forma viral, clara y ahorrándose una inversión de tiempo y emocional que no está nada mal y que yo misma habría agradecido hace tres meses después de romper con mi novio, con el que estuve saliendo durante once años.
Y es que si he de serte sincera, esta idea de Diana Martínez, @di.mart en TikTok, me ha parecido hasta lógica y coherente: la joven, que según comenta en su vídeo llevaba seis años con el que ya es su expareja, diseñó una imagen, que bien podría ser un cartel de cualquier festival de música, muy aesthetic, con la información básica para sus allegados sobre las circunstancias del fin de la relación.
Aunque claro, después de haberse hecho viral en la plataforma donde ya acumula más de 4 millones de visualizaciones y 346 mil "me gusta", lo mismo lo de hacerlo en petit comité para la gente con la que comparte grupos de WhatsApp ha quedado algo atrás. Eso sí, he de decir que indica que terminaron en noviembre y el vídeo lo subió en marzo a su cuenta en la red social.
Su propuesta consiste en plasmar en el documento en cuestión una especie de apartado de preguntas frecuentes con los detalles necesarios para saber los porqués de la ruptura. Ella ha incluido aspectos como cuándo sucedió, quién fue el culpable, si hay posibilidad de que vuelvan a estar juntos, el periodo de tiempo que establece de margen para dar más explicaciones a aquellos que tengan dudas y si considera que sus personas más cercanas tienen que alejarse del chico.
Una analogía con Sexo en Nueva York
La icónica seria de los 90 nos sigue encantando hoy en día con todas sus bondades y defectos: desde el "carriecentrismo" imperante en la producción, hasta esos detallitos a los que les cuesta superar el filtro del tiempo o el mal rollo entre escena y escena que tenían Sarah Jessica Parker (Carrie) y Kim Cattrall (Samantha), algo que me hace añicos el corazón mucho más que cualquier ruptura de la protagonista con Mr. Big.
No obstante, al ver esta idea de Diana Martínez, he recordado un capítulo, número nueve de la sexta temporada, en el que Carrie va junto a Stanford a la fiesta del bebé de unos amigos. Al llegar a la vivienda junto a los maravillosos regalos que han tenido que escoger de una lista, estos les piden que se descalcen, algo ante lo que Carrie de entrada no se siente muy cómoda, pero termina accediendo. Para su sorpresa, cuando se despide, sus zapatos de 485 dólares han volado.
La periodista le pide responsabilidades a los anfitriones, pero ellos le quitan importancia y como el episodio gira en torno a las normas y ciertas ventajas establecidas para aquellas personas que siguen lo que la sociedad espera de ellas: casarse, tener una familia y demás, Carrie termina confeccionando una lista de regalos para la boda de ella con sí misma. Y sí, solo hay una única cosa en ese encargo: un par de zapatos igualitos a los suyos que sus amigos le acaban regalando.
En el caso de la ruptura de Diana Martínez, la analogía con la anécdota de Carrie está en que cuando una pareja se casa envía un save the date con una información relativamente escueta sobre lo que será su gran día, algo que van detallando más adelante, y esta chica ha hecho justo lo mismo, solo que para informar sobre el desamor. ¿Y es que por qué no? Al fin y al cabo, en cualquier caso, la vida sigue. Te lo digo yo que sí.
Fotos | Capturas de pantalla del vídeo en la cuenta de TikTok de @di.mart
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